Una fe viva y eficaz, de forma constante. Cotidiana!

En una ocasión estaba viendo la ultima versión de la película Karate Kid protagonizada por los actores Jackie chang y Jaden Smith. En una de las escenas Jackie Chang comienza a entrenar a Jaden Smith.
Jaden Smith pensaba que aprender kung-fu para defenderse de sus enemigos era estar dentro de una academia, pero sin embargo Jackie Chang usa un método diferente. Incrusta un pequeño trozo de madera a modo de colgador en uno de los pilares del patio de su casa.
Y el entrenamiento era que Jade Smith debía sacarse, colgar, tomar, tirar al suelo, recoger, y volver a colocarse la chaqueta para volver a colgarla. Hasta que en un punto de su entrenamiento Jade Smith pierde la paciencia y encuentra ridículo el entrenamiento. Entonces Jackie Chang insiste en el método y en el transcurso, le enseña una serie de técnicas de defensa basado en el simple hecho de sacarse, colgar, tomar, tirar, recoger, ponerse y volver a colgar la chaqueta. Jackie Chang le enseña una gran lección de la esencia del Kung fu y le dice parafraseando:

El kung Fu se vive y se aprender en lo que hacemos, en las cosas cotidianas incluso en sacarnos y colocarnos una chaqueta

A todo esto les recomiendo que vean la película es muy bonita.
Podemos rescatar un principio importante de la ilustración anterior.

Creo que estamos fascinados con las proposiciones teológicas de la fe. Cuantos amantes de la teología se devoran libros de mil, dos mil y cuantas paginas de libros que nos intentan explicar la fe.
Creo que han leído más los textos de teología, que la misma Biblia y quien haya leído entera la Biblia se considerada una gran hazaña.
Ahora dejo en claro que no estoy contra el estudio formal de la Escritura, es más defiendo el estudio Bíblico serio, erudito y responsable, es muy necesario, pero no es menos cierto que la praxis es necesaria ya que hace posible la materialización de las cosas que creemos.
No se trata de vivir un sueño romántico con las enseñanzas de los padres reformadores y cristianos de la antigüedad, sino recorrer la senda que ellos recorrieron, una fe viva y eficaz, incluso en los asuntos cotidianos.
Una fe materializada en actos concretos lejos de los prejuicios religiosos tradicionales o de la religiosidad establecida o lejos de los cánones impuesto por otras culturas religiosas.
Entender que tenemos libertad de conciencia y derecho al juicio privado es un asunto que nos hace responsable ante el único soberano de la iglesia que es Cristo, y que lejos de cualquier prejuicio, las propuestas de la Sistemática deben manifestarse en los actos cotidianos de cada creyente.
La fe no es un asunto que se viva en las cuatro paredes de un templo, ni la fe es una simple charla en un auditorio, la fe nos invita a hacernos la pregunta en cómo vivimos las grandes doctrinas de la Biblia en los asuntos mas sencillos y complejos de la existencia humana. Existe una gran muralla, nuestra religiosidad tiene una idea errada de lo que es santidad.
La religiosidad tradicional evangélica piensa que santidad es la abstinencia de ciertos elementos o la separación absoluta de nuestra realidad. Para ellos Cristo es soberano en la iglesia, pero no en el mundo, que es su mundo. La fe de muchos muchos no es mas que una discusión de opiniones como: este autor piensa esto, no la verdad es como piensa este otro autor etc etc...

La fe se pone aprueba en lo que vivimos a diario, en el levantarnos, en el ducharnos, en el desayuno, camino a nuestros trabajos, colegios, universidades, en la cocina, en el sexo, en la familia en nuestras relaciones, con nuestros aciertos y desaciertos las fe necesita ser expresada y realizada, no sin razón Santiago dijo: la fe sin obra es muerta. Soli Deo Gloria

Una fe concreta, de Javier Allende Julio. Teologo, del Seminario Teológico Presbiteriano (Chile).
Amigo y hermano en la fé.

...Seamos columnas y baluartes de la verdad (1 Timoteo 3:15)